La DOP

Esta inscripción representó, pues, el reconocimiento oficial por parte de la Comisión en la Pera de Lleida, en sus variedades de Blanquilla, Limonera y Conference, ya sus características únicas que le vienen conferidas por el territorio en el que se cultiva (las comarcas del Segrià, la Noguera, Urgell, el Pla d’Urgell y las Garrigues). Un producto identificado con el distintivo DOP (Denominación de Origen Protegida) ha demostrado que tiene unas características que sólo son posibles gracias al entorno natural y en las habilidades de los productores de la zona con la que está asociado. También se caracteriza porque todas las fases del proceso de producción del alimento se realizan en la zona en cuestión, a diferencia de una IGP (Indicación Geográfica Protegida). Las variedades de la DOP Pera de Lleida presentan características organolépticas -entre las que destaca su dolçor-, de forma y de color que las diferencian del resto de peras producidas en España y en el resto de Europa. El registro definitivo de marzo de 2011 fue la culminación de un proceso que se había iniciado en 2004, impulsado entonces por Catalonia Calidad (ahora Afrucat) y que tenía como objetivo destacar las cualidades diferenciadas de la producción de peras leridanas frente al resto e identificar esa calidad superior en el punto de venta, trasladando esta información al consumidor. En 2006, este proceso de reconocimiento se vio marcado por un cambio de legislación, circunstancia que retrasó el reconocimiento provisional del distintivo DOP Pera de Lleida hasta el año 2008. La órden AAR/317/2008, de 23 de junio, aprobaba el Reglamento de la Denominación de Origen Protegida Pera de Lleida (DOGC núm. 5163 a 01/07/2008). A partir de ese día, la DOP Pera de Lleida se podía comercializar ya como tal en todo el territorio español.